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La carrera judicial: Dina Ochoa

Entrevista por: Ana Lucía Chavez.

Realizada el 26 de septiembre de 2019.



1.  ¿QUIÉN ES DINA OCHOA? Dina - Ante todo, Dina Josefina Ochoa Escribá es una persona que considera que Dios es la principal fuente de sabiduría. Soy una hija, madre y abuela que reconoce que la familia es el principal valor de nuestra sociedad. Además, me considero una mujer comprometida con la Justicia y con los valores que sustentan el Estado constitucional y democrático de Derecho. Bajo esas premisas he tenido el privilegio de servirle a este país por más de treinta y ocho años en el sistema judicial. He ocupado diferentes cargos en el Organismo Judicial. Inicié mi carrera como pasante, comisaria y oficial de un Juzgado de Paz; oficial y Secretaria de un Juzgado de Primera Instancia y durante mi trayectoria en ese Organismo desempeñé diferentes puestos como auxiliar de la administración de justicia.

Posteriormente, tuve la oportunidad de iniciar mi carrera judicial como la primera Jueza de Paz en los juzgados de turno de veinticuatro horas ubicados en la zona tres capitalina, los que estaban destinados únicamente a personal masculino. Luego, fungí como Jueza de Primera Instancia en diferentes ramos. Fui la primera Jueza de control de ejecución de medidas para adolescentes en conflicto con la ley penal en la República de Guatemala. A razón de la conformación de los juzgados especializados en femicidio y otras formas de violencia contra la mujer, fui Jueza pionera y, luego, electa como Magistrada propietaria de la Corte de Apelaciones en esa materia. Desde 2016 fui nombrada como Magistrada Titular de la Corte de Constitucionalidad, la cual presidí durante el período 2018-2019. Adicionalmente ocupé los cargos de Presidenta de la Junta de Disciplina Judicial del Organismo Judicial, Presidenta de la Asociación de Jueces y Magistrados del Organismo Judicial en tres periodos y representante titular del Comité de Red Centroamérica de Jueces, Fiscales y Defensores. En el ámbito académico, soy abogada y notaria por la Universidad Mariano Gálvez de Guatemala, Magister en Derecho de las Mujeres, Género y Acceso a la Justicia por la Universidad de San Carlos de Guatemala y, recientemente, Doctora en Derecho por la Universidad Mariano Gálvez de Guatemala, con reconocimiento Cum Laude. He sido jueza docente tutora en la Escuela de Estudios Judiciales y docente a nivel de grado y post grado en la Facultad de Derechos de la Universidad Mariano Gálvez. Coautora en diferentes ensayos y revisora y coautora del libro “Ensayos sobre el porqué de los derechos de las mujeres en el aula”, coautora del libro “Mujeres escriben sobre mujeres” En el ámbito social, he realizado diversos voluntariados sirviendo a mi comunidad.

2.  ¿POR QUÉ RAZÓN DECIDIÓ ESTUDIAR DERECHO? Dina - Por las enseñanzas y consejos de mi madre y de mi padre. Sinceramente, decidí estudiar Derecho pues mi padre, amigo, ejemplo y gran mentor, Eliseo Antonio Ochoa Aguirre, era un destacado juez y fue el quien me inspiró a seguir sus pasos en el fortalecimiento el Estado de Derecho, ya que él amaba la verdad y justicia No me arrepiento de haber escogido esta intrigante y noble profesión.

3.  ¿DE QUÉ MANERA CREE QUE HA IMPACTADO AL GREMIO SU EJERCICIO PROFESIONAL? Dina - Ser mujer en un ambiente en el que históricamente han predominado los hombres no ha sido fácil, pero sé que es la mejor evidencia para demostrarle a las futuras generaciones de mujeres que se pueden alcanzar posiciones importantes para impactar positivamente al país e ir cambiando los estigmas y paradigmas contra las mujeres y, así, para lograr una igualdad real. En cada uno de los cargos que he desempeñado he orientado mi actuar bajo los más altos estándares de probidad, honestidad e independencia y espero que eso sea un reflejo para todo el foro jurídico nacional. La independencia es la principal característica que debe tener una persona que imparte justicia y, por ello, en cada uno de los casos que he conocido he tomado las decisiones que estimo ajustadas al Derecho, sin importar los efectos que eso pueda tener en la opinión pública. Prueba de ello es el hecho que, en los últimos años, durante mi ejercicio como Magistrada de la Corte de Constitucionalidad, me he caracterizado por emitir votos razonados disidentes cuando, a mi juicio, las resoluciones han sido contrarias a mi criterio judicial. Espero que esos votos sirvan para incentivar un debate académico serio sobre los alcances y contenido de los fallos por el Tribunal Constitucional. Además, me llena de orgullo mencionar que durante el ejercicio de mi presidencia en la Corte de Constitucionalidad, impulsé políticas públicas de inclusión para personas en situaciones de vulnerabilidad: rampas de acceso al tribunal, traducción simultánea en las vistas públicas a los diversos idiomas indígenas reconocidos en Guatemala, la inauguración de la Oficina de Atención para Personas en Situación de Vulnerabilidad. Por otro lado, impulsé la creación de políticas en favor de la transparencia y rendición de cuentas, para la implementación de un modelo de justicia abierta en Guatemala. Espero que estas iniciativas sean replicadas en otras instituciones pues han producido impactos positivos en el quehacer de la Corte de Constitucionalidad. 4.  ¿QUÉ RETOS ACADÉMICOS Y PROFESIONALES HA CUMPLIDO Y CUÁLES SERÁN LOS SIGUIENTES? Dina - El Derecho es una ciencia que evoluciona constantemente y, con mayor frecuencia, en el marco del fenómeno de la globalización. Por ello, considero que todos los días los profesionales del Derecho debemos de seguir estudiando y nutriendo nuestros conocimientos para avanzar en la aspiración de consolidar un régimen en donde se respeten los derechos humanos. En este momento mi reto principal es culminar mi investidura como Magistrada de la Corte Constitucionalidad de manera digna y cumpliendo con el mandato que la Constitución me encomienda. Tengo la inquietud de seguir avanzando en mis estudios de postgrado y concluir con la redacción de una publicación académica en un futuro próximo. 5.  ¿POR QUÉ DECIDIÓ DEDICARSE A LA CARRERA JUDICIAL? Dina - La carrera judicial es el servicio más loable que una persona puede prestar para su país. Desde muy pequeña tuve la inquietud de incursionar en la carrera que mi padre realizó y entendí que mi vocación era ejercer la judicatura. Como indiqué, tengo más de 38 años en el sistema de justicia y he tenido la oportunidad de conocer cada una de sus aristas. Espero que más jóvenes decidan involucrarse en la función jurisdiccional pues Guatemala necesita personas probas, honestas, trabajadoras, con principios y valores, involucradas en la administración de justicia. 6.  ¿QUÉ ACTIVIDADES PIENSA QUE SON IMPORTANTES EN LA VIDA ESTUDIANTIL DE UN ALUMNO DE LA FACULTAD DE DERECHO?  Dina - Uno de los factores que más me motivaron como estudiante de Derecho fue trabajar, simultáneamente, en el Organismo Judicial. Considero que quienes estudian esta carrera deben de estar permanentemente involucrados con los aspectos prácticos del Derecho para que, de esa manera, puedan tener mayor amplitud y conocimiento sobre los principales retos que afronta el ordenamiento jurídico nacional. De igual manera, la investigación se constituye como la herramienta principal para desarrollar los aspectos más relevantes de la ciencia jurídica y que requieren de un abordaje integral para la formulación de nuevas propuestas y soluciones. Les invito a seguir luchando incansablemente por construir una sociedad más justa y equitativa.

7. EN SU OPINIÓN ¿DE QUÉ MANERA PUEDE UN ABOGADO Y NOTARIO DEJAR UNA HUELLA EN EL MUNDO? Dina - Considero que la manera más efectiva para que las y los profesionales del derecho dejen una huella en el mundo es trabajando incasablemente por los ideales de la Justicia y la verdad. De igual manera, es sumamente importante que las y los abogados pongan sus conocimientos y experiencia a disposición de las personas que más lo necesitan, el mejor ejemplo es el liderazgo que se debe cimentar desde el hogar hasta cada uno de los espacios de influencia en donde como profesionales del derecho hay que incidir para fomentar y reconstruir los principios y valores, que son la simiente de nuestra sociedad . La vocación del profesional del derecho debe ser consecuente con el valor de solidaridad contenido en el Código de Ética Profesional. Así, los grupos en situación de vulnerabilidad requieren de todos nuestros esfuerzos para consolidar un sistema donde se respeten sus derechos humanos y se les permita realizar su plena dignidad. No tengo la menor duda, que guiando el quehacer profesional bajo esa noción es que lograremos afianzar un mundo cada vez más justo.

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